Yo me lo guiso…
Hace unos días, un cliente nos hacía una consulta sobre autoconsumo. Tiene una casita de campo a la que no va mucho, y quería saber si la energía producida por unos paneles solares podría bastar.
Antes, el autoconsumo no estaba pensado para instalaciones de pequeña potencia, ya que los paneles solares que se fabricaban no producían un rendimiento demasiado alto y, por consiguiente, no generaban suficiente electricidad. No obstante, gracias al desarrollo energético, las cosas han cambiado y, en la actualidad, existen sistemas de autoconsumo eficientes capaces de generar electricidad para, por ejemplo, viviendas unifamiliares.
Cabe aclarar que existen dos tipos de sistemas de autoconsumo. Por un lado, el conectado a la red eléctrica, con el fin de que la potencia que no se utilice se pueda vender a la compañía suministradora. Por otro, el aislado, con el que se produce la electricidad que se consume al instante (y el cual puede apoyarse con un generador de gasoil).
El abaratamiento de estas instalaciones y las continuas subidas de la factura de la luz hacen que cada vez estén más de moda este tipo de sistemas, por cierto, altamente recomendables. Así que hemos sugerido a nuestro cliente que no se lo piense dos veces. Es una inversión a medio-largo plazo, pero estamos seguros de que va a quedar más que satisfecho.